Nacimiento del
Partido Revolucionario Moderno
Artículo de opinión
por:
Margarito Carlos De León Castillo
Tras agotar una larga jornada de trabajo profesional en
la constitución del expediente que solicitaba formalmente cambiar el nombre del
partido Alianza Social Dominicana, por
el de Partido Revolucionario Mayoritario.
El cuerpo legal de
los hombres y mujeres que decidimos migrar desde el ya obsoleto y actualmente
antidemocrático Partido Revolucionario Dominicano, satisfecho todos los
trámites y plazos legales y participar gallardamente en las vistas públicas
convocadas por la Junta Central Electoral.
Tras escuchar
argumentos insólitos de parte de los
partidos aliados y supeditados y arrodillados al actual gobierno, tuvimos que
inteligentemente ceder para no seguir perdiendo el tiempo e impedir la
prolongación de los debates consensuando que la letra M ya no sea legalmente
Mayoritario. Ahora significa Moderno.
Ahora bien y fue lo
que motivo este escrito. Quien impedirá
que nuestros miembros se consideren que somos la gran mayoría. Y que la población nos siga llamando
mayoritarios, además de modernos. A
partir de este momento somos el Partido Revolucionario Moderno y mayoritario
del país.
Y lo seremos por más
de una razón, porque quien se perfila como el próximo candidato de este partido
es un hombre moderno, de mediana edad, bien formado académicamente y políticamente actualizado, que satisface el
perfil y entra en consonancia con los actuales presidentes de varios países. Luis Abinader es el indicado y así lo
testifican todos los sondeos de opinión realizados.
El nombre no pudo ser
más adecuado, un partido moderno, tendrá que postular a un hombre moderno. Es lo más inteligente, es lo que recomiendan
las circunstancias. Quienes se oponían a
que fuésemos mayoritarios por temor a ser calificados de minoritarios, hoy
tristemente tendrán que admitir que se equivocaron, que siguen incurriendo en
errores que además de minoritarios también son atrasados y obsoletos.
Cuando las cosas se
planifican bien, lo más natural es que salgan bien, el país tiene hoy a su servicio un
instrumento vigoroso y fuerte no solo para defenderse y castigar a sus
verdugos. Para renovar sus esperanzas,
canalizar sus aspiraciones y ejercer su sagrado derecho al voto, Asumámoslo con un alto sentimiento de
propiedad, promovamos el PRM el partido más moderno y mayoritario de la
Republica Dominicana.
¡EL
PEÑAGOMISMO SIGUE VIGENTE, EN NUESTROS IDEALES!
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